El pasado mes de marzo los hondureños acudieron a las urnas convocados para elegir a los candidatos que se presentarán en las elecciones presidenciales de noviembre de 2021.
Las elecciones han servido no sólo para designar a los candidatos del Partido Nacional, Partido Liberal y el Partido Libertad y Refundación, mayoritarios, sino también para conocer el nivel de aceptación y popularidad entre una población desilusionada con su clase política.
Juan Orlando Hernández, actual presidente de Honduras, lidera un gobierno cuestionado por los altos índices de corrupción y mala gestión económica agravada ahora por la pandemia y los escasos recursos con los que cuentan los hospitales y medios sanitarios para hacer frente a ella.
La población hondureña se empobrece cada vez más y busca como única salida la inmigración hacia Estados Unidos ante la desestabilización social del país, la violencia de los grupos organizados y la falta de alternativas.